"Fiestas
de fraternidad II"
Se
preparaba para dormir había sido una noche muy agitada llena de
sorpresas, la muchacha se merecía un buen descanso pues pasó
todo tipo de situaciones agradables y no muy agradables.
Había
casualidades en la vida pero esta que acababa de recibir fue
bastante grande, nunca se imaginó que en esa fiesta por la que
había renegado tantas veces sería el lugar donde se llevaría
a cabo su reencuentro con un amigo de la infancia.
-
"¿Y bien?".
La
chica la observó con una sonrisa - "¿Y bien qué?" -
repitió.
-
"¡¡Vamos Jessica!!" - se exasperó - "me vas a
contar cuál es el gran misterio con ese chico".
-
"¿No sé de que me hablas?".
-
"No te hagas la inocente tienes algo con ese chico, lo sé".
-
"No tengo nada" - insistió.
-
"¡¡¿Entonces me puedes explicar él por qué de tu
actitud?!!" - preguntó perdiendo la paciencia -
"porque aunque nadie lo notó yo si pude ver tu sorpresa al
escuchar el nombre de ese joven ingles... además" -
continuó - "al principio fuiste muy fría con él hasta
parecía que el pobre hombre te hubiera hecho algo malo... pero
a medida que transcurría la velada pareciste olvidar lo que te
tenía tan molesta y hasta te la pasaste muy divertida hablando
con el tal Eriol".
Tomoyo
sonrió, si que había sido toda una sorpresa encontrarse a
aquel niño que hace años le puso todo tipo de pruebas a Sakura
y que pensó que jamás volvería a ver. Por supuesto que le
molestó que el tipo aprovechado resultara ser Eriol pues la
chica terminó descubriéndolo cuando el joven Jack hizo
referencia a una marca que parecía una bofetada en el rostro de
su amigo... y Eriol no tuvo más remedio que contar lo sucedido.
Tomoyo
aún no muy convencida de la explicación del chico fue un poco
indiferente con él - bueno nadie estaría feliz de que le
plantaran tremendo susto - pero al reflexionarlo mejor, creyó
al muchacho incapaz de hacer algo así pues siempre lo recordó
como a un joven muy respetuoso y maduro, terminó olvidando lo
sucedido y disfrutó de la compañía de su viejo amigo.
Mientras
se sumía en sus pensamientos acomodó su pijama, tomó un
cepillo del tocador y empezó a desarrendar su largo y brillante
cabello, entretanto Silvia tramaba su próxima estrategia para
lograr que su amiga dijera la verdad.
-
"Ves esto Jessica" - tomó un reloj de la mesa de
noche - "es las 1:00 de la mañana y si no me dices que
sucede contigo y el tal Hiragizawa, te juro que no pararé de
hablar y preguntar hasta las 6:00 de la mañana" - sentenció
en tono amenazante mientras colocaba el reloj frente a Tomoyo.
La
pobre chica terminó sucumbiendo a la amenaza de su compañera
de cuarto.
-
"Esta bien" - suspiró - "te lo contaré".
Tomoyo
contó todo lo referente a Eriol cuando era niño omitiendo,
claro esta, la parte de poderes mágicos, cartas y pruebas, además
terminó agregando un incidente muy resiente que le causó mucha
gracia a su amiga.
-
"Lo ves Jessica.. no fue tan difícil" - sonrió -
"conque fue Eriol el tipo que te encontraste en el salón
de música" - comentó muy divertida - "vaya
reencuentro con un viejo amigo plantarle una bofetada es algo
muy original que jamás olvidará".
-
"No te burles que no fue nada agradable, además él no
sabe que fui yo la chica que lo golpeó y te agradecería que no
se lo dijeras".
-
"Pero…" - Silvia recuperaba la atención de su amiga
- "no entiendo porque ese chico causa en ti tan gran
sobresalto" - Tomoyo parpadeó en señal de sorpresa -
"pues por lo que me cuentas solo fue un niño que estudió
contigo y tu hermana por un tiempo y por lo que se ve entablaron
algún tipo de amistad…" - replicó - "sin embargo
cuando le mencionas parece que no fue tan solo un amigo más,
sino que al contrario formó parte de tu pasado o por lo menos
una parte importante de tu infancia".
La
chica de ojos azules se quedó muda pero no porque no tuviera
nada que decir sino, porque le pareció sorprendente la
capacidad de observación que poseía su amiga pues jamás la
había notado tan analítica a pesar de que ya llevaban un mes
viviendo juntas, sin duda Tomoyo había descubierto una cualidad
que Silvia no había mostrado... hasta ahora. Por otro lado la
chica pelirroja tenía razón Eriol no solo fue un amigo.. pero
como contarle que aquel niño ahora un joven de 17 años, es la
reencarnación del mago más poderoso que haya existido.
Y
¡¡claro!! Que formo una parte importante de su infancia pues
es muy difícil que alguien olvide todos aquellos tipos de
prueba que en muchas ocasiones resultaron terroríficas pues ponían
en peligro a su mejor amiga. Eriol se había adjudicado un lugar
en la memoria de Tomoyo gracias a esos incidentes.. y por
supuesto que no podía olvidar todo lo relacionado con la magia
ya que toda su vida estuvo conviviendo con diferentes tipos de
poder como el de Sakura, el de Touya, Yukito y Kaho.
-
"Bueno si…" - Tomoyo habló por fin - "fue un
gran amigo a pesar del corto tiempo que se quedó en
Tomoeda".
-
"¿En serio?" - repentinamente cambió su tono de voz
- "No será que ese chico... fue tu primer amor ¿y por eso
es que lo tienes tan presente?".
Una
gota apareció sobre la cabeza de la estudiante de diseñadora -
"Por eso no quería contarte nada, porque sabía que dirías
algo como eso" - sonrió.
-
"¿Qué tiene de malo?" - preguntó con el mismo tono
- "el tal Eriol es muy guapo, tiene unos ojos preciosos, es
muy educado y se le nota que es muy adinerado".
Eriol
sin lugar a dudas se había convertido en un chico muy apuesto
conservaba el mismo estilo de cabello que llevaba de niño, seguía
teniendo los mismos ojos misteriosos, era bastante alto, de
fisonomía muy elegante y con una educación envidiable cortesía
de su excelente posición social.
-
"No Silvia, no estoy enamorada de él.. es un viejo amigo
nada más" - dio un pequeño bostezo - "y mejor ya
vamos a dormir que mañana tenemos clases muy importantes que
atender".
-
"Esta bien" - suspiró resignada.
En
el cuarto 17-E se apagaron las luces.
-
"¿Jessica?" - la melodiosa voz de Silvia rompió el
silencio una vez más - "tengo una duda ¿podrías
responderme algo más?".
-
"Adelante" - contestó la voz adormitada.
-
"En la fiesta tú y tu amigo hablaban muy en confianza
pero…" - hizo una pausa - "él se dirigía a ti como
a una chica que acababa de conocer ¿por qué no te llamo por tu
nombre verdadero?" - lo pensó por escasos segundos y después
de hacer su propio análisis sonrió divertida - "el no
sabe quien eres ¿verdad?".
La
chica se acomodó en su cama mientras una sonrisa se dibujaba en
su rostro - "sí, él no me reconoció".
-
"¿Por que no le revelaste tu verdadera identidad?" -
replicó.
-
"Ni yo misma lo sé" - respondió - "pero hasta
ahora esta resultado ser muy divertido ¿no lo crees?".
**************************
Para
la fiesta de su universidad faltaban apenas algunas horas.. las
cuales no esperaba con mucho entusiasmo pues por una serie de
incidentes inesperados no podría asistir.
-
"Es una lastima" - se resignó posando sus pupilas en
el hermoso panorama que se podía observar desde el cuarto de su
hermana.
-
"Lo siento mucho" - la voz infantil sonó apenada y
las lágrimas que se deslizaban por su delicado y lindo rostro
demostraban el gran sentimiento de culpa que oprimía su corazón.
La
chica volvió hacia el lecho de la pequeña.
-
"Yui..." - se acercó preocupada - "ya te
despertaste ¿cómo te sientes?".
-
"Lo siento mucho" - repitió con el mismo tono ahogado
por sus lágrimas.
-
"¿De que hablas?" - preguntó preocupada - "¿te
sientes mal?.. por favor ya no llores".
-
"Por mi culpa ya no podrás ir a divertirte con tus
amigos..." - Sakura suspiró aliviada, por un momento pensó
que a su pequeña hermana empezaba a dolerle alguna parte de su
cuerpo - ".. escuché que ya no podrás asistir a la fiesta
de tu escuela" - continuó diciendo mientras sus pupilas se
dilataban cada vez más.
La
antigua Card Captor le dedicó su más dulce sonrisa y trató de
tranquilizara - "No te preocupes, eso no me importa lo único
que me interesa es que tu estés bien".
-
"Pero si yo no me hubiera enfermado tú podrías irte"
- sollozó - "lo ves, todo es mi culpa".
-
"Fui yo la que decidí quedarme, así que no te
preocupes" - acarició su rostro limpiando todas sus lágrimas
- "tú eres mi hermana, mi familia, lo único que tengo...
nunca nada será más importante que tú ¿entiendes?".
Yui
sintió que toda su culpa se desvaneció en un segundo, su pequeño
corazón se lleno de la misma alegría que siempre la
inundaba… y abrazó a su hermana con todas sus fuerzas.
-
"Que bueno que ya te sientas mejor" - suspiró
abrazada a la pequeña - "¿quieres que te traiga algo?
Ahora mismo voy a la cocina a traer algo para Kero".
-
"Un postre" - habló un poco apenada.
-
"Un postre en camino" - sonrió.
Antes
de salir observó a Kero que se encontraba al lado de Yui
ofuscado todavía pues se acababa de despertar de una larga
siesta - "Cuídala por favor.. no me tardo" - el
guardián le hizo una seña y la joven terminó de salir del
cuarto.
Ya
en la cocina seleccionando algunas cosas como postres y
golosinas la angustia volvió a invadirla imaginando lo peor y
recordando lo sucedido por la mañana momentos antes que su
pequeña hermana se "enfermara". Ella acababa de bajar
arreglada y lista para desayunar…
-
"Buenos días" - saludaba como todas las mañanas a su
familia.
-
"Buenos días hermanita" - contestó la linda Yui.
-
"¡¡Vaya!! Todo se ve delicioso.. apuesto a que tú
hiciste el desayuno mamá" - se dirigió a Sonomi.
-
"Pues si" - contestó apenada.
-
"Hija…" - habló Fujitaka - "Hoy es la fiesta
de la universidad ¿verdad?".
-
"Sí papá".
-
"Recuerda que mañana saldremos muy temprano a Hong
Kong".
-
"No te preocupes, no regresaré tarde a casa".
-
"No esta demás que se lo recuerdes papá" - recriminó
Touya - "los monstruos como tu siempre tienen
retrasos".
Sakura
no reparó ni un segundo en hacer la misma acción de hace
muchos años, la cual consistía en darle un pisotón a su
hermano bajo la mesa.
-
"Demonios" - balbuceó el apuesto joven - "sigues
golpeando igual que un monstruo" - lanzó un nuevo insulto
sin importarle que podría recibir el mismo castigo.
-
"Dime Sakura" - Yukito interrumpió logrando impedir
una tercera guerra mundial - "Tienes planeado visitar a
alguien en especial en Hong Kong".
-
"No…" - dudó unos instantes - "No conocemos a
nadie de ahí".
-
"Claro que sí conocemos a alguien" - contradijo el
maestro - "O acaso ¿ya te olvidaste del joven Li?".
-
"¿De Shaoran?" - respondió al instante - "por
supuesto que no.. pero hace muchos años que perdimos el
contacto".
-
"Lo sé" - Yukito contestó con una sonrisa - "Es
por eso que se me ocurrió que ya que vas a su país, bien podrías
hacerle una visita.. y hasta reanudar su vieja amistad".
La
chica se sonrojó pues las palabras del maestro parecían ir
encaminadas a hacerle recordar que aquel chiquillo fue algo más
que su amigo, le recordó que él había sido en algún momento
su persona especial.
-
"Mi hermana no tiene por que ir a ver a ese mocoso" -
refunfuñó Touya - "y mucho menos reanudar amistad".
-
"¿De quien están hablando?" - preguntó una
despistada Yui - "¿Ese tal Shaoran era tu novio
hermanita?".
La
aludida se sonrojó, Touya casi escupe el café, Yukito mostró
una gran sonrisa al igual que Fujitaka, mientras Sonomi se
limitaba a reprender a su hija menor.
-
"No esta bien que digas esas cosas hija" - dijo ella -
"Esos comentarios son inapropiados".
-
"Lo siento mami…" - se apenó la chiquilla -
"pero si nadie me explica no me queda más remedio que
preguntar" - terminó diciendo con la inocencia reflejada
en su rostro.
-
"¿Cómo sigue tu alumno Yukito?" - Sonomi preguntaba
cambiando el tema - "Escuche que sé esta
recuperando".
-
"Sí, por suerte esta recobrando sus fuerzas más rápido
de lo que esperaban los doctores".
-
"Es el mismo chico que fue atacado hace un mes ¿verdad?"
- se interesó Touya.
-
"Sí, ahora que ya esta mejor podré preguntarle acerca de
su sospechoso ataque" - respondió pensativo observando a
su mejor amigo que tenia la misma expresión que él… se
notaba perfectamente que Touya tampoco había olvidado el
incidente mágico que sufrió ese muchacho.
-
"¿Por qué dices que su accidente fue sospechoso?" -
quiso saber Sakura.
-
"Lo que pasa es que mi alumno es una persona muy tranquila
no tenía enemigos es por eso que nos preocupa su repentino
accidente" - sonrió.
-
"A lo mejor solo eran ladrones y no querían testigos de su
robo" - Sonomi opinaba el incidente.
-
"Si eso debe ser" - Yukito quería dejar por terminada
esa conversación pues Sakura parecía interesarse en el tema y
aun no era prudente comentarle algo que solo conseguiría
preocuparla - "Creo que ya es hora de irme o llegaré tarde
a la escuela" - replicó mientras observaba su reloj -
"nos vemos luego".
En
el momento en que se levantó de la mesa, el maestro no se dio
cuenta que algo cayó de su bolsillo… la pequeña Yui se
percató del suceso y quiso devolver lo perdido, pero al hacer
contacto con el insignificante papel la niña vio todo negro, en
segundos miles de imágenes pasaron por su cabeza provocándole
un terrible dolor y no pudo más que balbucear tres palabras
audibles solo para los hermanos y el maestro - "estamos en
peligro" - al instante se desplomó en el piso provocando
en todos los presentes el pánico.
Sakura
y su familia se tranquilizaron cuando el doctor dio sus
explicaciones, la muchacha decidió no ir a la fiesta de su
universidad para poder cuidar a su hermana, pero la duda y el
temor seguían en ella.
Los
recuerdos de Sakura terminaron cuando ingresó en la habitación.
-
"Aquí está tu postre Yui".
-
"¡¡Muchas gracias hermanita!!".
-
"Kero" - llamó la chica a su guardián, este la
observó muy serio - "Se me olvidaron tus dulces ¿me
acompañas?.… no te importa que te dejemos unos instantes sola
¿verdad Yui?" - preguntó.
-
"No, esta bien… pero vuelvan pronto con los dulces porque
no me gusta estar sola" - pidió la niña.
-
"No te preocupes volvemos enseguida" - respondió
segura, mientras salía de la habitación con el muñeco
volador.
Sakura
y Kero recorrieron el pasillo en silencio, pero al llegar a la
habitación de la Card Captor….
-
"¿Qué esta pasando Kero?" - preguntó angustiada -
"pude sentir esa extraña energía que emanó de Yui por la
mañana".
-
"Se a lo que te refieres… yo también sentí ese
poder" - respondió serio - "pero la verdad….. es
que no sé lo que esta pasando esto me tomó por sorpresa".
-
"Estoy segura que mi hermano y Yukito también sintieron
esa energía pero aun no he tenido la oportunidad de platicarlo
con alguno de ellos".
-
"No debes preocuparte Sakurita" - Kero trataba de
tranquilizarla - "A lo mejor la pequeña Yui tiene algún
tipo de poder mágico como lo tienen tú y tu hermano pero fue
solo hasta hoy que pudo aflorar" - dijo el guardián -
"a lo mejor nos estamos preocupando de más ¿no
crees?."
-
"Puede que tengas razón…".
-
"Lo único que debemos hacer es ayudarle a desarrollar su
habilidad, así no sufrirá otro desmayo… recuerda que aun es
muy pequeña y es normal que no pueda controlar su poder "
- dijo el muñeco - "eso debió ser el motivo de su recaída…
así que es mejor que regresemos con Yui o puede
preocuparse" - terminado su análisis, Kero salió de la
habitación de su dueña, dejando a esta no muy convencida.
-
"Pero aun me preocupan sus palabras… que habrá querido
decir con que estamos en peligro" - suspiró mientras salía
de su habitación y escuchaba la voz de Kero y la risa de Yui
desde lejos.
****************************
-
"Esto que me cuentas me preocupa" - se angustió la
joven maestra.
-
"Imagínate como estoy yo".
-
"¿Y que dice Touya de todo esto?".
-
"La verdad es que no hemos hablado muy bien del
asunto…" - Yukito observaba al pequeño papel que
reposaba en las manos de Kaho - "y me temo que mis
sospechas se aclaran cada vez más".
-
"¿Te refieres al incidente que sufrió tu alumno?".
-
"Sí…" - suspiró - "en ese papel esta escrita
la dirección donde puedo encontrar algunas de las respuestas
que busco… estoy seguro que la persona que agredió a mi
alumno estaba ansiosa por poseerlo, por lo tanto lo que planea
él o las personas que estén involucradas no debe ser
bueno".
-
"¿Qué piensas hacer?".
-
"Con Yui enferma no puedo hacer mucho.. lo más seguro es
que Sakura querrá que la cuide y la vigile mientras ella esta
fuera" - respondió con la mirada clavada en el suelo -
"tendré que explicarle todo lo que ha sucedido en estas
semanas".
-
"¿Dices que los poderes de Yui despertaron al hacer
contacto con esto?" - preguntó la maestra súbitamente
preocupada mientras le mostraba el papel - "porque si es así,
lo único que esto puede significar es que…".
-
"Yui tiene premoniciones igual que Sakura" -
interrumpió el maestro.
-
"Y si ella dice que estamos en peligro…" - Kaho lucía
pensativa y preocupada a la vez.
-
"Lo mejor será que investigue todo lo que pueda, no puedo
quedarme cruzado de brazos… - Yukito se preparaba para salir -
"Touya me pidió que te dijera que estabas invitada a
cenar, en casa hablaremos mejor de este asunto".
-
"Claro, no faltaré" - respondió con una media
sonrisa mientras despedía al maestro.
Al
encontrarse sola en la oficina de su compañero de trabajo una
mirada decisiva apareció en su rostro - "Yo tampoco puedo
quedarme cruzada de brazos".
*************************
-
"¿Pero ella se encuentra bien?" - la voz del otro
lado del teléfono sonaba preocupada.
-
"Sí, Tomoyo… pero me siento muy inquieta".
-
"Lo sé" - suspiró - "es en momentos como este
en los que me arrepiento de haberme ido de casa. No puedo estar
allí para serviles de apoyo y ayudarlos".
-
"No digas eso que ya me siento culpable… dudé mucho en
decidir si te llamaba o no, y veo que lo único que conseguí
fue preocuparte" - Sakura se lamentaba.
-
"Para nada Sakura, hiciste muy bien en llamarme… yo
quiero estar enterada de todo lo que les pasé" - replicó
- "ustedes son mi familia y todo lo que tenga que ver con
ustedes me interesa. Así que si algo vuelve a suceder no dudes
en mantenerme al tanto de todo".
La
hermosa joven de ojos verdes asintió a las palabras de su
hermana.
-
"De acuerdo" - sonrió - "creo que solo hemos
estado hablando de mí y de nuestra situación en casa, pero..
¿cómo estas tú? ¿esta todo bien?".
-
"Todo esta bien, las clases van de maravilla, me siento
bastante tranquila y relajada a pesar del trabajo que tengo que
hacer".
-
"Espero no haber interrumpido algo importante.." -
repuso ella con tranquilidad - "si estas muy ocupada
podemos hablar después..".
-
"No Sakura, lo que más me hacia falta en estos momentos es
escuchar la animada voz de una de mis hermanas favoritas".
-
"Que solo te llama para darte malas noticias" - le
respondió desanimada.
-
"Sakura por favor no te pongas triste… yo sé que todo
saldrá bien" - la voz de la joven sonó súbitamente cálida
y llena de dulzura - "tú eres una chica muy fuerte y sea
lo que sea que le este pasando a Yui, yo tengo fe y confianza,
porque sé que si ella permanece a tu lado todo saldrá bien.
Por eso Sakura, tienes que volver a ser esa dulce y tierna niña
llena de valor para que la pequeña Yui sienta tu fortaleza y no
vuelva a recaer".
La
joven maestra de cartas parpadeó y sintió que su corazón se
volvía a llenar de esa confianza y valor que eran características
innatas en ella, sonrió ampliamente y murmuró con afecto…
-
"Gracias..".
-
"No hay porque".
-
"¿Jessica ya estas lista? aún quiero dar una vuelta por
los patios de la universidad antes de entrar a clases".
Se
escuchó el sonido de otra voz cerca del auricular.
-
"En un momento estoy contigo Silvia".
-
"Creo que ya tienes que irte a clase ¿verdad?" -
preguntó Sakura.
-
"Sí, pero muy pronto te llamaré, así que dame el número
del hotel en el que papá y tú se hospedarán en Hong
Kong" - la chica guardó el número en su agenda electrónica
y se despidió de su hermana - "nos vemos, y saluda a todos
de mi parte diles que les mandó muchos besos, abrazos y que los
extraño mucho..".
-
"Se los diré.." - contestó con una amplia sonrisa -
"cuídate y dales mis saludos a Silvia".
La
comunicación se terminó y Tomoyo guardó el teléfono móvil
en su bolso dando un gran suspiro.
-
"¿Era tu hermana?" - preguntó una apurada Silvia.
-
"Sí, te mandó saludos".
-
"Gracias, es tan amable.. la primera vez que hablé con
ella me pareció una persona realmente encantadora, era lo menos
que esperaba de ella siendo tu hermana, las dos son muy
parecidas…" - sonrió - "¿no le comentaste nada
acerca del joven ingles? porque ella también es amiga suya ¿qué
no?. De seguro le hubiera parecido bastante divertida la situación
en la que él y tú se reencontraron".
-
"Con todo lo que hablamos se me olvidó comentárselo"
- se cruzó de brazos - "es una lástima.. y yo que pensaba
decírselo en la primera oportunidad que tuviera, no
importa" - sonrió para ella misma - "cuando la llame
se lo contaré".
-
"Mientras tanto.." - Silvia tomó a Jessica por el
brazo - "será mejor que nosotras nos vayamos, porque como
ya te dije quiero dar una vuelta".
-
"No entiendo esa actitud Silvia" - contestó la joven
mientras su amiga la arrastraba hacia la puerta y ella tomaba
como podía sus apuntes de la mesa - "ciertamente te da lo
mismo llegar temprano o no, pero hoy pareces un poco
apurada".
-
"¿Que acaso no recuerdas que la universidad prestó sus
instalaciones a los alumnos de Oxford?" - contestó -
"por eso quiero dar una pequeña vuelta antes que entremos
a clases, imagínate que deleite nos daremos con todos esos
chicos guapos".
-
"Eso lo explica todo" - Tomoyo contuvo la risa -
"nunca cambias Silvia".
Precisamente
otras dos personas se preparaban para asistir a clases. Uno de
ellos con la misma intención que Silvia, con la única
diferencia que él esperaba ver lindas chicas… .
-
"¿Ya estas listo?".
-
"Sí, solo necesito hacer una llamada antes de irnos".
-
"¿Y a quien?" - preguntó el joven - "claro…
si se puede saber".
-
"Por supuesto" - contestó el muchacho con una sonrisa
- "voy a llamar a mi prima en Inglaterra, necesito que se
encargue de un asunto que tengo pendiente".
-
"¿Hablas de tu linda prima Nakuru?".
-
"La misma" - replicó con una sonrisa.
-
"Entonces te espero abajo…" - repuso Jack con prisa.
-
"¿Qué pasa contigo? … ¿Qué no eras tú el que estaba
renegando porque tendríamos obligaciones que cumplir fuera de
la universidad? … me extraña que ahora tengas tanta prisa por
asistir a clases"- expresó Eriol divertido
-
"Eso era antes de saber que los directores de la
universidad de diseñadoras "Fabien" ofrecieron sus
instalaciones para que los jóvenes de Oxford pudieran recibir
sus clases sin problemas… ¡¡imagínate!! podré estar tiempo
completo en el mismo lugar donde estudian esos dos bellos ángeles".
-
"¿Te refieres a Jessica Rame y a Silvia Vieira?".
-
"Exactamente".
-
"Ahora entiendo tu entusiasmo" - sonrió.
-
"¿No me digas que tú no te alegras por la noticia?"
- preguntó asombrado - "por que tú manera de actuar me
dice todo lo contrario".
-
"¿De que hablas?" - preguntó el joven hechicero
notando otra intención en las palabras de su amigo.
-
¡¡Vamos!! No finjas, sé muy bien que la chica Jessica te dejó
impactado".
-
"¿Por que lo dices?" - preguntó desconcertado.
-
"Comúnmente tú eres muy amable y respetuoso con todo el
mundo aún con las chicas que siempre te ahogan con sus
pretensiones sociales o quieren algo contigo… y aún así
sabes disimular muy bien tu incomodo" - replicó con una
expresión analítica - "en cambio en la fiesta te la
pasaste de lo más divertido con la señorita Jessica y es raro
que tú disfrutes tanto la compañía de una mujer pues casi
siempre solo soportas a esas chicas por cortesía, pero está
vez parece que ella logró captar tu interés ¿verdad?".
-
"Es cierto lo que dices, no puedo negar que es una chica
muy hermosa, dulce y agradable" - sonrió - "pero eso
no quiere decir que tengo algún otro interés que la amistad,
es más, ella me recordó mucho a una amiga que tuve en la
infancia".
-
"Eriol tú siempre tan extraño, te estoy hablando de una
hermosa chica y tú me sales con otro tema" - se cruzó de
brazos.
-
"Es en serio… ella me recordó mucho a alguien que conocí
hace años" - acentuó más su sonrisa - "la persona
de la que te hablo era tan dulce y agradable como esta chica
Jessica… podría jurar que son la misma persona".
-
"Bueno te seguiré la corriente pues veo que no tienes la más
mínima intención de seguir hablando de este tema" - se
resignó - "dime, ¿por qué dices que podrías jurar que
son la misma persona? te conozco muy bien y tú no eres de esos
que se olvida de la gente tan fácilmente… aunque hayan pasado
algunos años estoy seguro que tu serías capaz de reconocer a
esta chica en cualquier momento" - repuso con una sonrisa -
"así que dime… que es lo que hace dudar a la memoria
inigualable del gran Eriol".
El
joven rió, las palabras de su amigo eran indiscutibles pues él
nunca olvidaba a "ciertas personas" y como olvidar lo
bien que se la pasó en Tomoeda… en su memoria quedó bien
grabado el encantador grupo de Sakura: la dulce niña que seguía
a todas partes a su mejor amiga con una cámara de vídeo como
una fiel fan de sus hazañas, el joven chino enamorado de la
Card Captor, él serio Yue y él animado Yukito, él celoso
hermano y la maestra de Sakura… su fiel amiga y cómplice con
la cual todavía permanecía en contacto.
-
"La chica de mis recuerdos era hija única y esta otra
tiene otros tres hermanos" - aclaró.
-
"Eso es irrelevante, ella pudo haber tenido hermanos".
-
"Efectivamente… pero Tomoyo era la primogénita".
-
"¿¿Tomoyo??" - preguntó
-
"Ese es el nombre de mi amiga" - aclaró -
"Jessica tiene un hermano mayor lo cual comprueba que ella
no puede ser la misma chica que conocí en mi infancia".
-
" Agrégale a eso el hecho de que los nombres de las
muchachas son totalmente diferentes, pero… ¿cómo sabes que
Jessica tiene un hermano mayor?" - quiso saber Jack.
-
"Ella misma me lo contó" - sonrió - "tiene un
hermano y dos hermanas".
-
"¡¡Vaya!! Investigaste muy bien a la chica" - se
burló.
-
"Para nada" - negó sin perder la sonrisa - "en
nuestra agradable conversación no faltaron los temas
familiares… fue gracias a eso que ahora sé un poco de su
familia".
-
"En ese caso será mejor que nos apresuremos ya se hizo muy
tarde y como ya sabes no quiero faltar a clases" - repuso
el joven cogiendo las llaves del automóvil y bajando a toda
velocidad al estacionamiento - "¡¡te espero abajo!!"
- fue lo ultimo que gritó antes de desaparecer.
Una
pequeña gota surgió en la frente de Hiragizawa. Por la actitud
de su amigo, pudo notar que este estaba más que decidido a
disfrutar su estadía en Francia.
Recordando
el asunto que tenía pendiente se dispuso a llamar a su
"prima".
Del
otro lado de la línea contestó una voz de mujer que el joven
reconoció al instante.
-
"Hola Nakuru" - habló en su idioma natal -
"necesito que hagas algo por mí".
Las
jóvenes se paseaban por los pasillos buscando su salón de
clases, a pesar de ser una institución exclusivamente para señoritas
se podían apreciar algunas personas del sexo opuesto.
-
"Me siento tan cansada" - Silvia se tiró sin ánimos
en la banca.
-
"Me lo imagino anoche casi no dormiste" - Tomoyo se
sentó al lado de su amiga.
-
"Creo que estoy enferma" - observó el bello panorama
del campo de la universidad - "por lo menos puedo disfrutar
un poco del aire fresco y de la buena vista antes de atascarme
con clases".
-
"¿Que pasó con tu entusiasmo?" - sonrió -
"dentro de poco será el día para presentar los proyectos
de primer ciclo y tú dijiste que querías ser la número
uno".
-
"Sí, lo sé, pero estos últimos días no he estado muy
original que digamos… mi mente parece estar bloqueada o es que
estoy perdiendo mi talento o…" - dijo desanimada bajando
un poco su mirada.
-
"Nada de eso" - interrumpió Tomoyo - "tú eres
muy buena en lo que haces y no vas a dejar que un mal momento
por el que estas pasando te desanime ¿verdad?" - animó la
joven de ojos azules mostrando su mejor sonrisa - "lo único
que necesitas es descansar, salir y divertirte…estoy segura
que así encontraras la paz y la inspiración que buscas".
-
"Tienes razón" - le devolvió la sonrisa - "todo
saldrá bien, además si sigo contando con una amiga como tú no
tengo porque preocuparme".
-
"Así es, si no quieres que te reprenda tienes que hacer tú
mejor esfuerzo".
-
"Alguien se despertó muy decidida esta mañana" -
sonrió.
-
"No sé por que… pero hoy tengo muchas energías".
-
"Muy buenos días" - saludó alguien a espaldas de las
muchachas.
Las
dos chicas se encontraron con las caras sonrientes de Jack
Neville y Eriol Hiragizawa.
-
"Buenos días" - saludaron las dos chicas al unísono.
-
"Que sorpresa ¿se dirigen a clase?" - preguntó una
animada Silvia.
-
"Sí, igual que ustedes… ¿les importaría que las acompañáramos?"
- pidió Jack - "lo que pasa es que aun no conocemos muy
bien las instalaciones y no queremos llegar tarde a nuestra
primera clase".
-
"Será un placer guiarlos ¿verdad Jessica?" - se
dirigió a su amiga - "no queremos que se pierdan en su
primer día de clases aquí".
-
"Claro, además nosotras también estábamos a punto de
dirigirnos a nuestros propios salones" - sonrió - "¿Vamos?"
- hizo una señal y los cuatro jóvenes se pusieron en marcha.
Silvia
y Jack se enfrascaron rápidamente en una conversación mientras
la primera le mostraba todo lo que podía al joven Neville, por
otro lado los viejos amigos se ocupaban de su propia conversación.
-
"¿Dónde se están alojando?" - preguntó Tomoyo
-
"Los directores de Oxford alquilaron cinco pisos de un
hotel que se encuentra muy cerca de esta universidad" -
sonrió.
-
"¿Y cuánto tiempo se quedarán?".
-
"Por un período de unos cinco meses o tal vez más"-
continuó el chico sin perder la sonrisa.
-
"Eso significa que nos veremos muy seguido".
-
"Así parece… dime Jessica ¿de dónde eres?" -
repuso él con suavidad - "porque no eres francesa… eso
lo puedo adivinar por tu acento al hablar francés e inglés, y
bueno, te lo pregunto ahora porque en la fiesta no tuve la
oportunidad de hacerte esa pregunta".
-
"Soy Japonesa" - contestó ella con una sonrisa.
-
"Japón es un bello país" - comentó - "pero
permíteme felicitarte hablas muy bien el inglés y el francés".
-
"Muchas gracias, lo que sucede es que desde niña en las
vacaciones de la escuela… mi hermana y yo tomábamos clases de
los dos idiomas… es por eso que ahora lo manejo un poco".
-
"Eso es una muy buena manera de aprovechar el tiempo
libre" - sonrió - "¿sí lo prefieres podemos hablar
en japonés? yo también conozco el idioma y me imagino que así
te sentirás mucho mas cómoda".
-
"Es muy amable de tu parte…" - agradeció la chica
volviendo a hablar en su idioma natal - "y dime Eriol ¿tu
aprendiste japonés en algún curso?".
-
"No, mi caso es un poco diferente.. digamos que era mi
destino saber japonés".
La
duda apareció en el rostro de Tomoyo aunque no por mucho
tiempo, la chica recordaba el misterio que siempre rodeó a su
amigo y prefirió cambiar el tema.
-
"Por el comentario que hiciste acerca de mi país me
imagino que lo has visitado".
-
"Mas que eso, viví un tiempo ahí… tenía que resolver
un asunto que tenía pendiente" - contestó el muchacho de
lo más sincero - "pase un buen momento y conocí a
personas muy valiosas".
-
"¿De verdad?".
Tomoyo
se dio cuenta que faltaban apenas algunos pasos para llegar a su
destino. Se detuvo frente a su salón igual que su compañera de
cuarto que iba delante de ellos junto con el amigo de Eriol.
-
"Este es nuestro salón de clases" - Silvia señaló
el lugar - "pero no se preocupen, que para nuestra suerte
los salones que ocuparan ustedes y sus compañeros quedan
exactamente atrás de los nuestros" - aclaró la pelirroja
- "con esa información no se perderán".
-
"Muchas gracias por su amabilidad" - Eriol repuso con
una sonrisa.
-
"¿Estaría bien si nos vemos a la hora del almuerzo?"
- preguntó un astuto Jack.
-
"Por supuesto" - contestó una apurada Silvia pues la
campana sonó anunciando que ya era hora de empezar clases y notó
que todas sus compañeras se apresuraban a entrar al salón -
"¿verdad Jessica?" - observó a su amiga.
-
"Por mi no hay problema" - respondió - "después
de todo ya somos amigos ¿no es así?".
Teniendo
ya la promesa de las muchachas, sus dos amigos se apresuraron a
llegar a su salón mientras las chicas entraron apuradas al
suyo.
Y
como prometieron los muchachos se encontraron a la hora del
almuerzo, hablaron de todo un poco y entre risas y encuentros en
los recesos de clases… terminaron su día.
**************************
La
hermosa chica no apartaba la vista de la pequeña niña que iba
a su lado, se notaba un poco tensa y aunque le pareció una
buena idea distraer a su hermana con el paseo… no dejaba de
preocuparle su condición.
-
"¡¡Mira eso hermanita!!" - la pequeña señalaba por
todos lados con gran entusiasmo - "este país es muy
bonito".
-
"Me alegra que te guste Yui".
-
"Pero… ¿por qué papá no nos acompañó?" -
preguntó algo desanimada.
-
"Recuerda que estamos aquí porque papá tenía que
resolver algunos asuntos de trabajo y en estos momentos esta muy
ocupado, pero prometió estar con nosotras mañana todo el día".
En
último momento y por sugerencia de Yukito, Sakura decidió
incluir a Yui en el paseo a Hong Kong… después de todo no era
mala idea distraer a su hermana con un viaje relajante y
divertido… y sin pensarlo dos veces lo primero que hizo al
llegar a Hong Kong fue salir a dar un paseo.
-
"Mira ¡¡esos dulces se ven deliciosos!!" - exclamó
Yui súbitamente feliz.
-
"¡¡¿¿DULCES¡¡??" - gritó una chillante voz
dentro del bolso de Sakura.
-
"Cállate Kero" - le murmuró la hechicera a su bolso
notando que las personas empezaban a verla extraño -
"estamos en un lugar público y no quiero problemas".
-
"No es justo Sakura, yo también quiero comer" - renegó
el muñeco - "por favor no me dejes aquí… ¿por qué
ustedes pueden disfrutar de unos deliciosos dulces y yo
no?" - preguntó aun más cabizbajo y al borde de las lágrimas.
-
"Te prometo que tú también comerás lo que quieras…
pero por favor ahora quédate quieto" - rogó su dueña.
-
"De acuerdo" - aceptó - "pero recuerda que es
una promesa".
-
"Si a Kerito le molesta estar ahí ¿por qué no lo sacas
hermanita?" - preguntó una inocente Yui.
-
"Porque las personas se asustarían al verlo" -
contestó la chica acariciando la cabeza de la pequeña.
-
"¿Es por eso que casi nunca sale de la casa?".
-
"Sí" - sonrió.
-
"Pero a mi Kerito no me asusta ¡¡a mí me parece que es
muy lindo!!".
-
"Lo sé Yui, pero a otras personas les parecería extraño
y se asustarían".
Cerca
del lugar un joven que se veía bastante agitado le gritaba a
una chica desde una buena distancia.
-
"¡¡Espera no te vayas!!" - iba tan apurado y distraído
que se encontró de frente con Sakura y sin poder evitarlo…
chocó con esta teniendo como resultado sentir el duro pavimento
de la acera.
-
"¡¡Hermanita!!" - exclamó Yui asustada.
Sakura
aun ofuscada por la caída trataba de ver a la persona que había
chocado con ella… y se encontró con un par de ojos negros que
la veían apenado por el incidente. Era un joven bastante
apuesto de no más de 18 años, con grandes y expresivos ojos
negros, con un rebelde pero brillante cabello igual al color de
sus ojos, de fisonomía atlética, vestía bastante elegante,
pues parecía que el joven acababa de salir de una importante
reunión o algo parecido.
El
muchacho se reincorporó de inmediato para ayudar a la joven.
-
"Discúlpame, no fue mi intención, no me fije por donde
iba" - repitió mil y una disculpas mientras ayudaba a
Sakura a ponerse de pie y sobre la cabeza de Yui aparecían
miles de signos de interrogación.
-
"¿Por qué esta hablando raro este niño hermanita? no le
entiendo nada".
-
"¿japonés?- preguntó el joven adaptándose a la
lengua de las dos desconocidas - "discúlpame no me fije
por donde iba, estoy muy apenado por haberte causado tantos
problemas" - se inclinó apenado.
-
"No… no te preocupes fue un accidente" - respondió
una Sakura levemente sonrojada por las continuas disculpas que
el apuesto joven daba.
Un
lujoso automóvil se estacionó frente a los muchachos dejando
ver también a un apuesto conductor, un joven de cabello castaño
y con un par de ojos del mismo color.
-
"¿Qué sucede Lung? se nos esta haciendo tarde y no quiero
hacer esperar a los del concilio" - habló él muchacho.
Sakura
observó al chico notando que en el asiento del copiloto
reposaba una hermosa joven.
-
"Discúlpame amigo, pero es que iba tan apurado que le
cause molestias a esta señorita" - Lung se excusaba ante
su amigo.
El
muchacho en el automóvil observó a la joven por un segundo
indiferente a su presencia y dirigió su mirada a otro lado.
Pero
rápidamente volvió sus ojos a la muchacha que tenía frente a
sí, absorto por su belleza, y en la profundidad de esos
hermosos ojos verdes le pareció conocer a la chica. Tuvo una
sensación extraña al verla que lo estremeció de pies a
cabeza.
Sakura
se sonrojó al sentir la mirada intensa del apuesto joven.
-
"Pues si ya te disculpaste con esta chica… lo mejor es
que nos pongamos en camino" - la chica del automóvil
replicó un poco molesta, logrado apartar la vista de su acompañante
- "ya es un poco tarde ¿no?".
Lung
frunció levemente el ceño - "tienes razón Kaory, tal vez
sí salieras un poco más rápido de tus clases y me esperaras
en la entrada ya que fui yo el que se tomó la molestia de irte
a buscar… ya estaríamos con los del concilio" - respondió
fríamente.
La
bella chica lo observó molesta ¡¡cómo detestaba al mejor
amigo de su novio!! pero tenía que controlarse y hacer caso
omiso a sus palabras dándole como única respuesta un silencio
total.
-
"Una vez más discúlpame" - el muchacho hizo una última
reverencia a Sakura, le hizo una risueña seña de despedida a
la pequeña Yui y subió al automóvil.
-
"Hasta luego" - Sakura también se despedía del trío
notando que la muchacha que respondía al nombre de Kaory la
observaba de una manera despectiva mientras la analizaba de pies
a cabeza.
El
conductor hizo una reverencia con la cabeza y el auto se puso en
marcha.
-
"¿Por qué esa chica me observó de esa manera?" -
susurraba Sakura para ella misma.
El
bolso de la chica comenzó a moverse con desesperación
-"Kero que té pasa… quédate quieto ¿quieres?".
Con
muchos esfuerzos el muñeco volador logro sacar su pequeña
cabeza del mortífero bolso que lo aprisionaba.
-
"¿Con quien estabas Sakura?" - le preguntó a su dueña
sin darle tiempo a esta para poder reclamarle por salir de su
escondite.
-
"¿Qué? Eran unos amigos de un chico que chocó
conmigo" - respondió aun no muy convencida.
-
"Esas personas… poseen poderes mágicos" - aclaró
el guardián - "y una de esas presencias se me hizo muy
familiar".
-
"¿Qué dices? ¡¡Que poseen poderes mágicos!!" - se
sobresaltó la Card Captor - "Yo no sentí nada
anormal".
-
"¡¡Hay Sakura!! eres una distraída ¿en que pensabas que
no lo notaste?" - reclamó el muñeco.
La
chica se apenó recordando que se había sonrojado ante el
apuesto joven del automóvil.
-
"Lo siento mucho" - se acongojó.
-
"Eso ya no importa…" - replicó el guardián sin
importancia - "aun así no entiendo por que una de las tres
presencias me recordó a esa persona".
Sakura
observaba dubitativa al peluche.
-
"Hasta podría jurar que esa presencia pertenecía a aquel
sujeto chino a aquel moco…".
Las
palabras de Kero se vieron interrumpidas al sentir que unas
pequeñas y delicadas manos lo sacaban del bolso de su dueña
para llevarlo a un cálido regazo.
Sakura
tardó en reaccionar al ver a su hermana con Kero en brazos y a
media acera, con personas por todas partes paseando por las
calles de Hong Kong.
-
"¡¡¿Qué haces Yui?!!" - exclamó llamando la
atención más que su hermana que tenía en sus brazos a un muñeco
parlanchín.
-
"No te enojes hermanita" - le dijo ella con una gran
sonrisa - "Saqué a Kerito de tu bolso porque tengo una
idea" - continuó sin perder la sonrisa - "¿sí
Kerito quiere? puede estar afuera conmigo sin hablar y sin
moverse… así todos pensarán que es mi peluche".
-
"¡¡Eso es una buena idea Yui!!" - la voz de Kero sonó
feliz y aliviada.
Sakura
lo dudó por unos instantes pero terminó cediendo - "Esta
bien" - suspiró - "pero nada de hablar ¿me oíste
Kero?".
-
"Lo prometo Sakurita".
-
"Pues entonces… en marcha" - sugirió con una
sonrisa - "aun hay mucho que ver".
-
"¿Hermanita?" - llamó Yui a la chica - "¿vas a
ir a visitar al niño que era tu novio… ese del que habló
Yukito?" - preguntó con esa inocencia innata en ella.
-
"No lo creo Yui" - sonrió - "ya ni siquiera
recuerdo donde vive y la única manera de contactarlo sería que
de casualidad me lo encontrase por ahí" - exclamó
divertida.
-
"¡¡Achuuuuu!!" - un joven estornudó mientras se
bajaba de un lujoso automóvil.
-
"¿Qué sucede Shaoran? ¿pescaste un resfriado?" - la
chica que iba a su lado preguntó un poco preocupada.
-
"Puede ser" - contestó el muchacho sin tomarle mucha
importancia - "¿qué me decías Lung?".
-
"Te decía que es una lástima que haya reunión del
concilió en estos momentos" - suspiró con resignación -
"escuché que hoy había llegado al país un arqueólogo
muy importante… y que daría una única visita a la
universidad para impartir una charla" - se cruzó de brazos
- "y como yo sé que eso de la arqueología es algo que te
llama la atención… pensaba invitarte para que fueras conmigo
a ver a ese hombre, pero no contaba con esta reunión de último
minuto".
-
"Pues sí, es una verdadera lástima" - contestó
serio - "pero esto es algo mucho más importante que una
charla de arqueología".
-
"Parece que nuestra única distracción será la fiesta de
la universidad hoy en la noche" - comentó resignado.
-
"Buenas tardes amo Shaoran" - un anciano con
apariencia de mayordomo saludaba al chico - "buenas tardes
señorita Narazaki, joven Sheng".
-
"Hola Wei, ¿cómo esta todo?" - preguntaba Shaoran
-
"Solo faltan ustedes para empezar la reunión" -
contestó con tranquilidad.
-
"Iré a ponerme mi traje ceremonial" - repuso serio -
"sugiero que ustedes también se apresuren" - se
dirigió a sus acompañantes
-
"Entonces nos encontramos en la sala" - sugirió Lung
con la misma expresión.
-
"Por mi no hay problema" - Kaory le contestaba
indiferente.
Los
tres jóvenes partieron en diferentes direcciones.
*************************
La
voz se extendía por todo el lugar anunciando la llegada del
vuelo 406 proveniente de Inglaterra.
La
bella mujer se veía atareada y un poco molesta.
-
"Me molesta llegar y que nadie me este esperando" -
murmuraba para ella misma - "no entiendo para que nos pidió
que viniéramos con tanta urgencia".
-
"Ya deja de quejarte" - la mujer recibió una
respuesta desde las profundidades de su bolso - "si el amo
nos pidió que nos encargáramos de ese asunto que es importante
para él… nuestro deber es obedecerlo".
-
"Eso ya lo sé" - respondió ella - "no pongo en
discusión su orden".
-
"¿Entonces?" - el individuo en el fondo del bolso se
dejo ver mejor mostrando a algo que parecía un peluche negro
con alas.
-
"Si era tan importante… ¿por qué no nos dijo de que se
trataba ese asunto que hay que resolver?".
-
"Muy pronto lo sabremos" - replicó el muñeco posando
su vista en una mujer que se acercaba.
-
"Siento mucho el retraso…" - se disculpó la mujer
al encontrarse frente a los desconocidos - "pero tuve
problemas para salir de mi trabajo".
-
"Ya no te preocupes Kaho" - la chica repuso con una
sonrisa - "al fin y al cabo Spi y yo acabamos de
llegar".
-
"¿Cómo estuvo tu vuelo Nakuru?".
-
"No muy bien".
-
"Y tu Spinel ¿cómo estas?".
-
"Muy bien gracias, aunque viajar tanto tiempo en un bolso y
con una completa descuidada como acompañante no es muy
agradable".
-
"¡¡Oye!!" - protestó la mujer - "mejor cuéntame
Kaho… ¿cual es el asunto del que Eriol no nos aclaró
nada?".
-
"Con mucho gusto" - sonrió - "¿nos
vamos?".
-
"Pero primero cuéntame… ¿cómo esta mi querido
Touya?" - pidió la guardiana con un mohín gracioso.
*********************
Fujitaka
Kinomoto ingresaba a su Suite de lujo un poco cansado y tenso,
todo esto producto de un duro día de trabajo.
-
"¡Ya llegué!" - se anunció.
-
"Hola papá" - saludaba Sakura a su padre mientras salía
de una de las habitaciones - "¿cómo estuvo tu día?".
-
"Muy bien, aunque bastante atareado" - respondió
mientras se sentaba sin fuerzas en uno de los muebles -
"tuve algunas invitaciones de último minuto para ir a una
prestigiosa universidad a impartir una charla y eso terminó por
absorber mi tiempo…. - observó a su alrededor como buscando
algo - "¿dónde esta tu hermana?".
-
"Se acaba de dormir" - sonrió - "nosotras también
tuvimos un día muy activo".
-
"Me alegra que se hayan divertido".
-
"Aunque Yui estaba un poco triste porque no pudiste acompañarnos
al paseo".
-
"Lo siento mucho hija" - se disculpó - "pero
como lo prometí, mañana estaré libre para acompañarlas a
donde quieran ir".
-
"No te preocupes papá" - lo observó comprensiva
mientras se sentaba a su lado - "Yui y yo sabemos lo que te
encanta tu trabajo y nosotras solo deseamos tu felicidad".
-
"Muchas gracias hija" - Fujitaka le regaló su más
dulce sonrisa - "ahora que lo recuerdo… me enteré que la
universidad a la que fui a impartir la charla tenía una fiesta
esta noche y como los directores sabían que una de mis hijas
mayores había venido conmigo a Hong Kong… me regalaron una
entrada para que puedas asistir" - se sacó la invitación
del bolsillo de su chaqueta y se la mostró a Sakura.
-
"Gracias papá, pero creo que mejor no voy" - le
contestó algo desanimada - "no conozco a nadie de esa
universidad y me sentiría un poco fuera de lugar ¿qué podría
hacer yo ahí?".
-
"Sé que te desanimaste mucho al no poder ir a la fiesta
que tu universidad organizó.." - replicó tranquilo -
"¿por qué no te animas y vas a está que se te
presenta?" - preguntó con una sonrisa - "estoy seguro
que harás amigos muy rápido, además yo puedo recogerte a la
hora que me llames… ¿no me digas que no tienes ganas de
ir?".
-
"Lo que sucede es que ya es muy tarde, además, no tengo
que ponerme" - trató de excusar.
-
"No es tan tarde" - contradijo sin perder la sonrisa -
"apenas son las 7:00 y lo del vestuario se puede
arreglar" - le respondió mientras sacaba algo de una de
las bolsas que traía.
Sakura
quedo impresionada cuando su padre le mostró el hermoso
vestido.
-
"Lo ves" - continuó Fujitaka - "ahora ya no
tienes excusa".
La
chica permaneció desconcertada algunos segundos para después
dibujar una gran sonrisa en su rostro - "¿por qué
no?" - pensó, y agregó en voz alta - "esta bien
papá, iré a esa fiesta".
Sakura
comprendía la preocupación de su padre y los intentos que este
hacía para tratar de reanimarla, aunque no le llamaba mucho la
atención asistir a un lugar donde estaría con desconocidos…
trataría de acoplarse al ambiente para complacer a su padre y
así no darle algo más en que pensar, además que algo bueno
podría resultar de esa fiesta… hasta podría hacer amigos en
Hong Kong.
-
"Me alegro que te hayas animado hija, ve a cambiarte y yo
te llevaré a la universidad".
La
muchacha siguió las indicaciones de su padre y en minutos
estaba lista para partir.
Fujitaka
mostró una sonrisa de aprobación al ver a la joven.
-
"Estas hermosa hija" - le dijo él poniéndose de pie
y tomando sus manos.
-
"Gracias papá" - contestó ella con un leve rubor en
sus mejillas, el vestido entre rosado pálido y blanco parecía
estar hecho a su medida, su brillante cabello desparramado sobre
sus hombros encajaba perfectamente con sus bellos ojos verdes
que desprendían un brillo único.
En
15 minutos llegaron a su destino Sakura se bajó del auto un
poco indecisa pero terminó tomando valor, se despidió de su
padre y entró al lugar.
Causó
una gran impresión a aquellos que jamás habían visto en la
universidad a aquella joven tan hermosa, no tardo en ser rodeada
por miles de chicos que deseaban conocer la identidad de la
chica.
-
"¿Qué esta pasando ahí?" - le preguntó un joven de
cabello negro a su acompañante cuando pasaron por el lugar de
la escena.
-
"No lo sé" - contestó dubitativa la hermosa chica
china - "a lo mejor solo se trata de una chica linda que
esta siendo acosada por todos esos chicos" - se cruzó de
brazos.
-
"Lo dices por experiencia ¿verdad Mei?" - comentó
burlón.
-
"No empieces con tus bromas Lung" - se formó una
pequeña vena arriba de su ceja derecha - "mejor dime ¿dónde
esta Shaoran? … tengo que darle un mensaje de la desagradable
de Kaory y no ha llegado".
-
"Sabes que él quería investigar un poco más acerca del
asunto del quinto" - repuso el joven - "es tan terco
que no pude convencerlo de que saliera temprano… pero dime ¿qué
pasa con Kaory?".
-
"Tuvo un improvisto así que no podrá venir a la fiesta y
me pidió que le avisara a mi primo" - observó para todos
lados buscando una cara conocida - "¿dónde estará?"
- susurró.
-
"A lo mejor está entre esa masa de chicos
alborotados" - reía Lung.
-
"No seas tonto" - observó al circulo humano con
compasión - "pobre chica" - susurró mientras una
mirada decidida se formó en su rostro.
-
"¡¡Mei!! ¿Adónde vas?" - llamó el muchacho a la
joven al ver que esta se dirigía al circulo de personas.
Con
un rápido y ágil movimiento la joven china pudo introducirse
en la barrera humana logrando rescatar a la chica que se
encontraba dentro, dejando confundidos y hablando solos a todos
los hombres en el lugar.
Sakura
parpadeó confundida al notar que ya estaba alejada de la
multitud, observó a su salvadora agradecida y cuando estaba a
punto agradecerle su acción…
-
"¡¡Eres tú!!" - Lung señalaba a la chica de
hermosos ojos verdes mientras Mei Ling los observaba con la duda
reflejada en su rostro - "eres esa chica japonesa con la
que choqué esta tarde" - aclaraba él.
-
"Tú eres ese chico" - replicó la joven.
-
"¿Se conocen?" - preguntó una confundida Mei Ling.
-
"Sí" - contestó él - "está tarde tuvimos un
pequeño accidente".
-
"¿Accidente?" - repitió Mei Ling.
-
"Iba tan distraído por la calle que tropecé con
ella".
-
"No me extraña nada que seas tan descuidado" - una
gota de sudor resbalaba por la nuca de la joven.
-
"¿Disculpa?" - Sakura retomaba la atención de Mei
Ling - "gracias por haberme ayudado a salir de ahí… me
sentí un poco agobiada por el acoso de todos esos chicos
".
-
"No hay de que" - sonrió - "imaginé que estarías
incomoda con todos ellos a tu alrededor haciéndote toda clase
de preguntas".
Los
muchachos que habían acorralado a Sakura buscaban de nuevo su
presencia por lo que la chica y sus dos salvadores con el temor
de ser encontrados y de morir bajo una bola humana, salieron
casi corriendo hacía uno de los impresionantes patios de la
universidad.
-
"Aquí estaremos bien" - el joven Sheng se cercioraba
de que no hubiera personas alrededor.
-
"Muchas gracias… la verdad es que no conozco a nadie de
este lugar" - se sincero Sakura ya más tranquila -
"estoy acompañando a mi padre en un viaje de negocios y él
insistió en que viniera a esta fiesta a distraerme".
-
"Eso explica porque nunca te he visto por aquí" -
aseguró Mei Ling.
Una
sombra observaba a los jóvenes desde la altura de un árbol.
Por
un lapso de dos segundos una extraña energía sobresaltó a
Sakura y a Lung.
-
"¿Sucede algo?" - preguntó la chica de largo cabello
negro al notar la reacción.
-
"Habrá sido mi imaginación" - pensaba Sakura -
"no, no sucede nada" - repuso con una sonrisa - "¿habrá
sido este chico?… después de todo Kero dijo que él y sus
amigos poseían poderes mágicos".
La
persona en el árbol sonreía divertido.
-
"¿Qué fue eso?"- se preguntaba Lung - "era
una energía extraña…¿habrá sido esta chica?…”-
analizaba a Sakura de pies a cabeza - "disculpa, pero aun
no nos has dicho tu nombre" - repuso él con tranquilidad.
-
"Disculpen mis malos modales" - se apenó la joven -
"mi nombre es Sa…".
-
"¡¡Lung!!" - llamaba alguien.
Un
apuesto joven de cabello castaño se acercó al trío.
-
"Al fin te encuentro" - replicó con el ceño
levemente fruncido - "estuve buscándolos por todos
lados" - se quejó.
-
"¡¡Conque decidiste aparecer!!" - exclamó el joven
Sheng - "tu prima tiene un mensaje que darte de parte de
Kaory".
Cuando
los ojos del joven buscaban el rostro de su prima para recibir
el mensaje de su novia, su mirada se tropezó con unos preciosos
ojos verdes y un rostro de ensueño.
-
"Tú eres esa chica" - susurró - "la de está
tarde".
La
persona en la cima del árbol los observó acentuando su sonrisa
- "por fin están los tres reunidos" - murmuró.
Con
un rápido movimiento saltó del lugar dando un perfecto
aterrizaje justo frente a los cuatro chiquillos…. desplegó
sus manos haciendo sentir toda su energía.
-
"¡¡Cuidado!!" - gritó Lung mientras se lanzaba
sobre Mei Ling y Shaoran hacía lo mismo con Sakura.
Una
gran energía fue lanzada al lugar donde se encontraban los jóvenes,
de no haberse apartado de ahí lo más seguro es que no hubiera
quedado rastro de ellos.
-
"¡¡¿Qué demonios?!!" - maldecía Lung en el suelo
abrazado de Mei Ling.
-
"¿Quién es ese hombre?" - Shaoran hacía sus propias
interrogantes.
-
"¡¡Muy buenos reflejos!!" - se burló la persona que
resultó ser un hombre con extrañas vestimentas - "espero
que puedan esquivarlo de nuevo… aunque no suelo fallar dos
veces" - se preparaba para realizar un nuevo ataque.
Li
Shaoran se reincorporó rápidamente y susurrando algunas
palabras hizo aparecer una barrera que lo cubrió a él y a las
otras tres personas en el suelo… logrando así soportar el
segundo impacto.
-
"Me impresionas jovencito" - replicó el atacante -
"nunca conocí a alguien que pudiera detener mi ataque con
una barrera común y corriente, tus poderes deben ser muy
grandes…. Shaoran Li ".
-
"¿Qué fue lo que dijo?" - habló una incrédula
Sakura - " ¡Shaoran Li!.. ese chico es… Shaoran" -
murmuró lentamente, para luego observar el angustiado pero
hermoso rostro de la joven china - "entonces, ella debe ser
Mei Ling" - susurró.
-
"Creo que me divertiré un poco con ustedes" - a un
nuevo conjuro del agresor unas sombras parecidas a él salieron
de la nada colocándose en posición de ataque - "veamos
que tan buenos son en artes marciales" - hizo una señal y
las sombras se abalanzaron contra sus enemigos.
Lung
y Shaoran contraatacaron protegiendo a las dos muchachas… los
dos chicos acabaron sin problemas con sus atacantes.
Sakura
se puso de pie decidida a brindar ayuda a los dos jóvenes
hechiceros.
-
"¿Qué haces?" - la chica fue retenida por una
preocupada Mei Ling - "Si te acercas podrán matarte".
-
"No te preocupes" - la tranquilizó ella - "estaré
bien" - se desprendió lentamente de sus manos.
Sakura
tomó su llave con decisión y empezó a recitar su conjuro
mientras su energía se desplegaba ante los atónitos ojos de
Sheng y Li… este último no lo podía creer - "¡Esa
llave!… la conozco, a ella… la conozco".
-
"¡¡Libérate!!" - fue la última línea del conjuro
de la chica - "Hola Shaoran" - lo saludó al notar que
sus ojos color marrón la
observaba - "me alegra volver a verte" - la joven le
mostró su mejor sonrisa.
-
"Sakura" - murmuró el muchacho.
-
"Sakura" - Mei Ling la observó incrédula.
La
joven dejó al descubierto el esplendoroso báculo que siempre
había poseído ahora con muchos cambios, era mucho más largo y
poseía una pequeña pero hermosa gema roja adornada con siete
pequeños picos de estrella, sobre la gema reposaba una pequeña
luna y sobre esta, una gran estrella de cinco picos con otra de
cuatro a su espalda que dejaba como resultado una gran estrella
de nueve picos. A su lado se desplegaban dos esplendorosas alas
que iniciaban desde la pequeña luna y terminaban en la gran
estrella de nueve picos.
El
báculo que poseía la joven era casi idéntico al que utilizó
siete años atrás en la batalla contra Eriol para poder cambiar
las cartas de la luz y la oscuridad. Sus jóvenes amigos no podían
dar crédito a lo que veían.
-
"Conque la joven maestra de cartas decidió hacerse
presente… bien así será más divertido ¿veamos que puedes
hacer?" - el hombre juntó una bola de fuego en sus manos
mientras recitaba su conjuro - "fuego
eterno del infierno yo te invoco conviértete en pura energía,
obedéceme e imponte a aquel que es mi enemigo"
- sin titubear le lanzó la energía a la chica.
Sakura
resolvió sin problemas la situación.
-
"¡¡Escudo!!" - la bola de fuego chocó contra la
barrera de ella desvaneciéndose al instante.
-
"Eres bastante buena niña" - habló el hombre -
"esa bola de fuego no es detenida por nada, además de ser
uno de mis hechizos más poderosos… pero parece que te he
subestimado" - rió - "pues entonces esta vez pelearé
en serio".
Cuando
estaba a punto de abalanzarse sobre la joven una espada se empuñó
colocándose justo en la garganta del sujeto, haciendo que este
se parara en seco.
-
"¿Qué té pasa?" - replicó Lung tomando con más
firmeza su espada - "¿por qué eres tan descortés con las
damas?".
-
"Me había olvidado del jefe del clan Sheng…" -
sonrió - "eso es un terrible error de mi parte que podría
costarme la vida" - observó a su alrededor buscando algo
para distraer al joven y sonrió complacido al encontrar su
oportunidad.
A
un movimiento de sus manos formó unas dagas de hielo que lanzó
contra una desprotegida Mei Ling, la chica se encontraba
demasiado distraída para poder evitar el ataque.
-
"¡¡Mei cuidado!!" - Lung corría con todas sus
fuerzas maldiciendo el momento que descuido a la muchacha por
atacar a ese sujeto.
Las
piernas de la chica se paralizaron, parecía que Lung no iba ser
capaz de llegar en su auxilio y cuando las dagas estaban a punto
de llegarle… una impresionante bola de fuego las derritió
ante los ojos de la chica china. La figura imponente de lo que
parecía un gran león se paró frente a ella, llevando en el
lomo a una linda niña.
-
"¡¡Kero!!" - gritó Sakura súbitamente feliz al ver
a su guardián.. aunque su alegría no duró mucho al notar a la
persona que traía en el lomo - "¡¡Yui!!… ¡¿qué
significa esto Kero?!" - la inundó el pánico - "¿cómo
es posible que traigas a mi hermana a este lugar?".
-
"Lo siento Sakura" - se lamento el león - "pero
no tuve otra opción".
-
"Que guardián tan entrometido tienes" - el agresor se
dirigió a la antigua Card Captor - "¿conque esa linda niña
es tu hermana? … veámosla un poco más de cerca" -
desprendió unos hilos de sus manos con dirección a Yui.
Los
hilos nunca cometieron su objetivo pues una impresionante espada
cortó la situación - "Que poco honor tienes al tratar de
conseguir a una pequeña niña como rehén" - el jefe del
clan Li lo observó con el ceño fruncido - "ven pequeña"
- alzó sus brazos a Yui - "vamos con tu hermana".
La
menor de los Kinomoto observó a su hermana mayor esperando la
aprobación de esta.
-
"Esta bien Yui" - sonrió la hechicera - "el no
te hará daño".
La
niña se tiró a los brazos del joven y este la entregó a su
hermana.
-
"Gracias" - murmuró ella.
-
"No hay de que" - sonrió él.
Sakura
puso a su hermana y a Mei Ling bajó la protección de
"Escudo". Los tres hechiceros se incorporaron y
enfrentaron juntos al enemigo.
El
hombre observó el semblante decidido de los tres jóvenes -
"parece que esta vez sí pelearán en serio" - balbuceó.
Notas
de la Autora: Aquí esta el tercer capítulo, espero que les
este gustando hasta ahora y ¿sí no? ,por favor háganmelo
saber. ¡¡Que problemas pasan nuestros amigos!! ¿Por qué
Tomoyo no quiere revelar su identidad? Supongo que la chica
tiene sus razones… y que me dicen de Yui… menuda sorpresa
que nos dio. ¿Cómo es posible que a Kero se le ocurra llevar a
la niña al lugar menos seguro del mundo?.
¿¿¿Se
dieron cuenta que Nakuru ya llegó a Japón??? De seguro que no
va a dejar a Touya ni a sol ni a sombra… la guardiana está
clavadísima con él.
Sigo
esperando sus comentarios, pues para una novata como yo es muy
alentador recibir sus puntos de vista.
Para
cualquier duda, reclamo, sugerencia o felicitaciones saben que
pueden escribirme a:
Saito_san_1@yahoo.com.mx
o bien a saito113@hotmail.com.
Aclaración:
Con respecto al lugar donde trabaja Yukito el "Campus
Clamp" lo utilicé solo porque me gusta el nombre. La
escuela no tiene nada que ver con otro anime ¿Ok?, SOLO UTILIZO
SU NOMBRE.
Avances
del próximo capítulo: Continua la batalla de nuestros
protagonistas, Tomoyo tiene una peculiar charla con su hermana
mientras Nakuru se hace presente y logrará acabar con la
paciencia de Touya. Yukito averigua un poco más de los
incidentes que han pasado últimamente, Kero tiene que enfrentar
los reclamos de su dueña mientras Yui hace de las suyas.